El ascenso controlado es una de las prácticas más importantes en el buceo recreativo y profesional. Esta técnica consiste en ascender de manera lenta y gradual después de una inmersión para permitir que el nitrógeno disuelto en el cuerpo se libere de manera segura. En este post, exploraremos en detalle qué es un ascenso controlado, por qué es crucial para los buceadores, y cómo realizarlo correctamente siguiendo las recomendaciones de seguridad.
¿Qué es el Ascenso Controlado?
Cuando un buceador desciende bajo el agua, su cuerpo absorbe gases, principalmente nitrógeno, a medida que la presión ambiental aumenta. Cuanto más profundo y más tiempo permanezca en el agua, más nitrógeno disuelto habrá en su cuerpo. Si se realiza un ascenso rápido, este nitrógeno no tiene tiempo suficiente para escapar de manera gradual y segura, lo que puede resultar en la formación de burbujas dentro del cuerpo, un fenómeno conocido como enfermedad por descompresión (EDC).
El ascenso controlado permite que el nitrógeno se libere lentamente a través de la respiración, minimizando el riesgo de complicaciones
Velocidad Máxima de Ascenso Recomendado
Para garantizar la seguridad durante el ascenso, la velocidad máxima recomendada es de 9 metros por minuto (30 pies por minuto). Este ritmo moderado asegura que el nitrógeno disuelto en los tejidos del cuerpo tenga tiempo suficiente para salir a través del torrente sanguíneo y ser exhalado.
¿Qué sucede si asciendes demasiado rápido?
Un ascenso rápido o descontrolado puede llevar a problemas graves de salud, incluyendo:
- Enfermedad por descompresión: Las burbujas de nitrógeno pueden formar embolias en los vasos sanguíneos, lo que provoca dolor intenso, mareos, dificultad para respirar y en casos severos, parálisis o muerte.
- Barotrauma pulmonar: Debido a los cambios bruscos de presión, los pulmones pueden expandirse demasiado rápido, causando daño a los tejidos.
Por lo tanto, el ascenso controlado es esencial para evitar estos riesgos.
Técnicas para Realizar un Ascenso Controlado
A continuación, te mostramos algunas de las mejores prácticas para realizar un ascenso controlado:
- Monitorea tu profundidad: Utiliza un medidor de profundidad o un ordenador de buceo para verificar que no superas los 9 metros por minuto.
- Controla tu flotabilidad: Ajusta el volumen de aire en tu chaleco de flotación (BCD) para evitar ascender demasiado rápido. Evita impulsarte hacia arriba con las aletas.
- Realiza paradas de seguridad: Una parada de seguridad es una pausa intencionada en el ascenso, generalmente a unos 5 metros de profundidad, durante 3 minutos. Esto permite que el nitrógeno se libere de manera más efectiva, incluso si te has mantenido dentro de los límites de buceo sin descompresión.
- Mantén la calma y respira normalmente: Es crucial no contener la respiración durante el ascenso. La respiración normal y continua ayuda a que el nitrógeno se libere de manera eficiente.
Todas estas técnicas se aprenden durante el Curso Open Water Diver y se perfecciónan en el Advanced.
Fórmulas para Calcular el Tiempo de Ascenso
Para un buceador que ha alcanzado una profundidad de 30 metros, podemos calcular el tiempo de ascenso siguiendo la velocidad máxima recomendada.
- Profundidad: 30 metros
- Velocidad de ascenso: 9 metros por minuto
La fórmula para calcular el tiempo de ascenso es simple:
Tiempo de ascenso=ProfundidadVelocidad de ascenso\text{Tiempo de ascenso} = \frac{\text{Profundidad}}{\text{Velocidad de ascenso}}Tiempo de ascenso=Velocidad de ascensoProfundidad
Sustituyendo los valores:
Tiempo de ascenso=30 metros9 metros por minuto=3.33 minutos\text{Tiempo de ascenso} = \frac{30 \, \text{metros}}{9 \, \text{metros por minuto}} = 3.33 \, \text{minutos}Tiempo de ascenso=9metros por minuto30metros=3.33minutos
Esto significa que el buceador tardará aproximadamente 3.33 minutos en ascender desde 30 metros de profundidad si sigue la velocidad recomendada.
Factores que Afectan el Ascenso
Es importante tener en cuenta varios factores que pueden influir en cómo realizar un ascenso controlado de manera segura:
- Condiciones del agua: Las corrientes submarinas pueden afectar tu capacidad para controlar la velocidad de ascenso. Debes ajustar tu flotabilidad de acuerdo con las condiciones del entorno.
- Estado físico del buceador: El estrés, la fatiga y la deshidratación pueden aumentar el riesgo de enfermedad por descompresión. Mantén un buen estado físico antes y después de la inmersión.
- Uso de Nitrox: Al utilizar una mezcla de aire enriquecido (Nitrox), se reduce la cantidad de nitrógeno inhalado durante el buceo, lo que disminuye el riesgo de descompresión, aunque las reglas de ascenso controlado siguen siendo importantes.
Importancia del Ascenso Controlado en Buceos Profundos
Cuanto más profundo sea el buceo, mayor será la cantidad de nitrógeno disuelto en los tejidos del cuerpo. En inmersiones profundas o prolongadas, es recomendable realizar paradas de descompresión obligatorias, que son pausas adicionales a distintas profundidades para asegurar la liberación del nitrógeno acumulado.
El ascenso controlado es una técnica esencial para la seguridad del buceador. Mantener una velocidad de ascenso de 9 metros por minuto, realizar paradas de seguridad y controlar la flotabilidad son acciones clave para prevenir la enfermedad por descompresión y otros riesgos asociados con el buceo. Al dominar estas técnicas, los buceadores pueden disfrutar de sus inmersiones con mayor tranquilidad y seguridad.